Un dispersante sin cenizas es un aditivo utilizado en aceites industriales que ayuda a mantener las partículas y los productos de combustión en suspensión, evitando la formación de depósitos y lodos. A diferencia de otros dispersantes, un dispersante sin cenizas no contiene elementos como el fósforo, azufre, zinc o calcio, que pueden dejar residuos sólidos o cenizas después de su uso.
Los dispersantes sin cenizas se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, desde lubricantes para automóviles hasta aceites industriales utilizados en maquinaria pesada y equipos industriales. Estos aditivos evitan la formación de depósitos y lodos en el motor o la maquinaria, mejorando así su rendimiento y prolongando su vida útil.
Además de ser libres de cenizas, estos dispersantes también suelen ser compatibles con catalizadores y filtros de partículas, lo que los hace ideales para su uso en vehículos modernos con requisitos más estrictos de emisiones y control de la contaminación.
En resumen, un dispersante sin cenizas es un aditivo utilizado en aceites industriales para evitar la formación de depósitos y lodos, sin dejar residuos sólidos o cenizas. Proporciona una limpieza interna efectiva de los motores y equipos, mejorando su rendimiento y prolongando su vida útil.
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