La viscosidad es una medida de la resistencia de un fluido a fluir. Es una propiedad que describe la facilidad con la que un fluido (líquido o gas) fluye o se deforma bajo un esfuerzo cortante aplicado. En pocas palabras, es una medida del “espesor” o “viscosidad” de un fluido.
La viscosidad suele medirse mediante un viscosímetro, un dispositivo diseñado específicamente para este fin. Existen diferentes tipos de viscosímetros según la naturaleza de la sustancia que se mide y la precisión requerida. Generalmente se mide en unidades de centipoise (cP) o poise (P). Algunos viscosímetros comunes incluyen:
- Viscosímetro capilar: Es un método utilizado para medir la viscosidad de líquidos muy viscosos y de alta temperatura. Estos viscosímetros miden la viscosidad en función del tiempo que tarda un volumen fijo de fluido en fluir a través de un tubo estrecho o tubo capilar bajo gravedad u otra presión aplicada. El caudal se determina midiendo el volumen de líquido que fluye a través de un tubo capilar durante un intervalo de tiempo determinado.
- Viscosímetro rotacional: estos viscosímetros miden la viscosidad en función del par requerido para girar un mandril o husillo sumergido en el fluido que se está midiendo. La viscosidad se calcula en función de la resistencia rotacional asociada con la viscosidad.
- Viscosímetro de bola descendente: este método se utiliza para medir la viscosidad de líquidos de baja viscosidad. Consiste en colocar una bola pesada en un líquido y medir el tiempo que tarda en caer una cierta distancia. A partir de esta medición se puede calcular la viscosidad del líquido. Estos viscosímetros miden la viscosidad en función del tiempo que tarda una pequeña bola o esfera en caer en una columna de altura fija del fluido que se está midiendo. La velocidad de descenso de la bola es función de la viscosidad del fluido.
- Viscosímetro Brookfield: Es un instrumento comúnmente utilizado para medir la viscosidad de líquidos de diferentes consistencias. Un viscosímetro Brookfield utiliza un husillo giratorio que se sumerge en el fluido de prueba y mide la resistencia que encuentra el husillo a medida que gira. A partir de esta medición se puede calcular la viscosidad del líquido.
Vale la pena señalar que la viscosidad de un fluido se ve muy afectada por su temperatura. Por lo tanto, las mediciones de viscosidad generalmente deben ir acompañadas de una temperatura medida para proporcionar una comparación significativa y garantizar la precisión.
Deja un comentario